mas acerca del accidente

Se enluta La Sierra Negra

Especial

El Mundo de Tehuacán /El Mundo de Tehuacán
México 05 de julio, 2007

“Yo vi cuando el autobús pasó por mi casa y adelante en la curva ya no salió, pues en ese momento quedaron sepultados todos”, dijo Donato Trujillo, un testigo de la tragedia

El Mundo de Tehuacán

“Vamos a meter brigadas de 20 personas con palas para remover la tierra y piedras, no podemos quedar viéndonos cuando hay personas atrapadas ahí debajo”, gritaban vecinos de Zacacoapan, al tratar de intervenir en el rescate de los pasajeros del autobús número 24.
No era posible su participación, pues soldados resguardaban la zona al correr el riesgo de continuar cayendo piedras.
“No es una zona segura, primero hay que ver la posibilidad de meter maquinaria pesada y si no llega, entonces entran las brigadas en intervalos de 20”, dijo Agustín Vallejo, coronel del 24 Regimiento de Caballería Motorizada.
Eran las 08:30 y una máquina retroexcavadora trabajaba lentamente, ante la mirada de unas 300 personas entre pobladores, médicos, rescatistas policías y militares. El accidente había sido reportado a las estaciones de radio de Tehuacán, única forma de pedir ayuda para la gente de la Sierra Negra, al no contar con teléfonos de emergencia y mucho menos planes de contingencia en cada municipio de esa zona.
“Yo vi cuando pasó el autobús por mi casa y adelante en la curva ya no salió, pues en ese momento se desgajó el cerro y quedaron aplastados todos”, dijo Donato Trujillo, testigo de la tragedia.
Lo interrogaban a cada momento, toda autoridad que iba llegando al lugar del accidente.
Agustín Vallejo, coronel del 24 Regimiento de Caballería Motorizado, a cada momento con un altavoz, trataba de retirar a los curiosos de las laderas donde las lluvias habían reblandecido los cerros y peligraba con desgajarse por el peso y movimiento de la gente.
Más de una hora tardó en llegar la primera máquina para retirar la tierra, avanzando lentamente hacia el lugar donde los dos únicos testigos aseguraban haber visto el autobús y comenzó a cavar.
Llanto, preocupación y confusión entre algunas personas, era la escena que se vivía a cada momento en Zacacoapan, pues preguntaban familiares de las víctimas sobre los hechos, otros desconocían si ahí viajaban sus hijos, padres o vecinos, pues quienes pensaban que se habían accidentado, llegaron más tarde, agradeciendo haberse tardado en salir de su casa y los dejó el autobús.
Otras familias confirmaron a sus familiares como víctimas, pues minutos antes habían salido hacia Zinacatepec para cobrar sus pensiones o Procampo, pero ya no llegaron.
Mientras tanto, otros pobladores se unieron a la causa y llevaron tacos, agua y refrescos para los rescatistas, y autoridades que en su momento actuarían en esta tragedia. Los reportes hacia la capital poblana se hicieron llegar y en seguida las autoridades, incluyendo al gobernador Mario Marín Torres.
Minutos después, luego de ordenar algunos trabajos y el apoyo a los dolientes, se retiró del lugar llevándose algunos abucheos y silbidos de los pobladores, muestra de su descontento por escuchar sólo promesas.
Los cuerpos de rescate, Ministerio Público y Secretaría de Salud, se organizaron creando módulos de atención a los familiares de las víctimas, así como para la recopilación de datos para la identificación de los cadáveres. El equipo humano esperaba su turno, luego de que la maquinaria lograra encontrar parte del autobús para iniciar el rescate de las víctimas.
Crónica
‘Se desgajó y el cerro los sepultó’
“Estábamos parados en la carretera, pasó el autobús número 24 a las 05:30 horas, iba lleno, pero minutos después, adelante se desgajó el cerro y lo sepultó, corrimos hasta el lugar, pero había mucha tierra, luego fuimos a Zacacoapan a confirmar si no había llegado y comenzamos a pedir auxilio”, dijeron los hermanos Donato y Camerino Trujillo Martínez.
La verdad no escuchamos gritos de auxilio, pues estábamos arriba del montón de tierra, pero el cerro continuaba desgajándose, dijeron los testigos.
Vía telefónica pidieron auxilio a las corporaciones de Tehuacán, luego el llamado se hizo llegar hasta la capital poblana de donde se desplazaron corporaciones y autoridades en helicópteros, pero al parecer no podía creer lo que había pasado, pues a cada momento preguntaban a los testigos “¿Ustedes vieron cómo la tierra aplastó al autobús?”, y los hermanos Trujillo Martínez respondían: Sí, ya les dijimos que sí, el autobús iba pasando cuando se desgajó el cerro.
Camerino Trujillo, comisionado de asuntos indígenas y testigo de esta tragedia, a cada momento aseguraba los hechos, al tiempo que también señalaba la irresponsabilidad de las autoridades estatales a quienes hicieron llegar oficios donde pedían apoyo para arreglar la carretera y evitar una tragedia que ayer llegó, dijo.
“No podíamos mover toda esa tierra, no hay medios para pedir auxilio, fue hasta las 08:30 horas cuando comenzaron a llegar las autoridades de todos lados, pero sólo se quedaban viendo y me volvían a preguntar si estaba debajo el autobús, en lugar de traer maquinaria para retirar las piedras y tierra que aplastó a los pasajeros”, expresó Donato Trujillo.
Dice la gente
Viajaban alumnos y maestros
Puebla.- Maestros y alumnos, algunos del Colegio de Bachilleres de San Miguel Eloxochitlán, así como campesinos, iban en el autobús que salió de Tlacotepec y fue sepultado por un alud en Zacacoapan.
De acuerdo con pobladores de Eloxochitlán, algunos de los maestros que viajaban en la unidad, son Francisco Fernández Santos, Oscar Guzmán, Adriana López y Tomasa Cruz Javier, así como Maximino Guzmán, padre de familia.
La principal tarea de los rescatistas es quitar cerca de 100 toneladas que cubren el autobús en el que se estima viajaban cerca de 50 personas, así como retirar las gigantescas piedras que se desgajaron del cerro. Autoridades de Protección Civil estiman que en 48 horas podrían llegar al objetivo de encontrar el camión, el cual tiene el número económico 530 de la línea de autobuses Sierra Negra y que cubría el trayecto Tlacotepec de Porfirio Díaz a Tehuacán.
Por otra parte, el Gobierno de Veracruz envió un equipo de Protección Civil para cooperar en las labores de remoción de escombros y rescate de las personas que viajaban en un autobús de la ruta Tlacotepec- Tehuacán, sepultados por un alud.
Desde ayer partió a la comunidad Zacacoapan, en el vecino estado de Puebla, una brigada de salud de la Jurisdicción Sanitaria de Orizaba.